Dicen que el miedo viene por
experiencias negativas sufridas en la infancia, y en cierta manera creo que es
verdad. Desde pequeño nos meten miedo para que no hagamos ciertas cosas, y para
que seamos cautos con otras, es una manera de proteger, pero es posible que sea
a su vez un condicionante para el desarrollo (en todos los aspectos) de una
persona.
El miedo tiene mil formas, a la
soledad, al fracaso, al cambio, al equivocarnos, a la muerte, al qué pensarán,
al futuro……. Etc. Somos agredidos continuamente con comentarios, noticias,
preguntas y actos que nos crean incertidumbre, en general, el tener miedo es lo
más común que nos puede pasar, pero, ¿es realmente sano?
Entiendo que el miedo es el
sentimiento más negativo que una persona puede tener, el temor a algo o alguien
te paraliza, no te deja pensar con fluidez y te hace un blanco débil (el miedo
del débil es el alimento del fuerte). Cosa distinta es sentir incertidumbre
frente a lo desconocido, o el ser cauto a la hora de tomar una decisión o hacer
algún cambio importante.
Dejarnos llevar por el miedo es
lo menos útil que nos puede pasar, ya que sólo nos proporciona resultados
negativos, de hecho, hay muchas premisas que todos damos por sentadas y son
generadoras de miedo, es decir; vas a
morir, te vas a equivocar, vas a fracasar, te vas a sentir solo, tu vida seguro
que dará un gran cambio en algún momento, por ello, no sabes que te deparará el
futuro … etc, entonces, si ya sabemos esto, ¿por qué seguimos sufriendo?
Cuando las personas son capaces
de apartar el miedo, comienzan a generar confianza en sí mismas, y poco a poco
esa confianza la hacen extensibles a otros ámbitos de la vida, como el trabajo.
Y es que, la confianza en uno mismo, sí trae consecuencias positivas.
Es comúnmente conocido, como una
inmensa mayoría de empresas, utiliza el miedo como principal medida en su gestión
de personal, se ha hecho y se seguirá haciendo, esto sólo da como resultado,
personas sin motivación y frustradas, que no pueden desarrollarse plenamente,
por lo que al final, la misma empresa que cree que así tienes más éxito y poder, realmente está perdiendo en capital
humano.
Personalmente creo que otra forma
de gestión de personas es posible y necesaria, y mientras los Departamentos de
RR.HH van reinventándose con una nueva idea de gestión basada en la motivación,
el talento personal, y la comunicación, las personas deben trabajar en reforzar la
confianza, en no tener miedo a una organización, sus directivos, ni a sus
medidas, y ser capaces de afrontar con determinación todas las situaciones
venideras.
Si algo bueno se va a sacar de
esta crisis, es el cambio que la sociedad debe experimentar a todos los niveles, y espero que este se vea reflejado en la forma de gestión de capital humano en las
organizaciones.
¿Qué harías si nos tuvieras miedo? Pues hazlo…
Creamos miedos estrechamente enlazados a nuestros más ansiados sueños, porque si los alcanzamos seremos seres
ResponderEliminartotalmente diferentes y felices...
Muy cierto! como siempre, muchas gracias por tus comentarios.
ResponderEliminarUn abrazo